AFA-FIFA: BURZACO, COSENTINO y otros

En el último mes y medio hemos tenido la fortuna de observar lo que podría denominarse sálvese quien pueda.

La siempre lenta, morosa y por momentos cándida o connivente Justicia de algunos países, por ejemplo la italiana y la argentina, no obstante han evidenciado algunos escasos avances que –pese a ello- permitieron desnudar cantidad de focos de corrupción en el mundo del fútbol. Y decimos Sálvese quien Pueda porque, a diferencia de otros años y épocas, quienes no aparecen mencionados en estos escándalos, lejos de colaborar, comienzan a escapar en estampida., y desaparecen, como ocurre en la Copa América. Veamos:

  1.  Cuando se estremeció el mundo del fútbol, hace pocos días, con la orden de detención de altos directivos de distintas Confederaciones y de la FIFA, además de terceros allegados a los negocios, advertimos que, como no podía ser de otra forma, algunos argentinos estaban en la lista. Alejandro Burzaco, titular de la empresa Torneos, y Hugo y Mariano Jinkis, padre e hijo respectivamente, quienes estaban a cargo de la sociedad Full Play Group.

Otros directivos del fútbol y conocidos –socios en ciertos casos- de estos señores, se ocultaron rápidamente. A la Justicia de nuestro país nadie le tema. Sean argentinos, sean extranjeros. Su falta de respuestas es, actualmente, de tal magnitud, que por momentos dan risa sus resoluciones, y por otros una fuerte sensación de impotencia porque generan impunidad sistémica.

En Italia las cosas, en materia de Justicia, funcionan un poco mejor. Pero lo que quedó claro fue que Burzaco, prófugo, apenas pudo moverse pocos kilómetros y, acorralado, se presentó detenido en una comisaría de Bolzano, aprovechando su condición de ciudadano  italiano. Logró quedar privado de libertad pero en la modalidad domiciliaria que, se sabe, es bastante más cómoda que la que se cumple en cárceles.

Como para no ser menos, hace pocos días se presentaron detenidos ante el Juez Bonadío Hugo y Mariano Jinkis. Ya se había denegado la exención de prisión pedida para evitar la prisión. No lo lograron pero, como el coimputado Burzaco se les aceptó permanecer presos en domicilio. Porqué a ellos sí y a otros no se preguntarán con seguridad muchos ciudadanos. Pues bien, esta es nuestra Justicia les contesto. Con prebendas, arreglos espurios, esperas, acuerdos entre bambalinas, dinero, poder, etc. Para quien se ha pasado una vida transitando por los Tribunales, dentro y fuera de sus estructuras, todo esto se entiende perfectamente. El ciudadano de a pié solo asiste impávido a este teatro de la impunidad como regla básica no escrita.

No conviene, porque no es cierto, pregonar bondades o grandilocuencia de la Justicia de los EEUU. Al cabo, lo que sucede en Guantánamo es intolerable y los jueces de ese país lo vienen tolerando y justificando sin chistar. Pero también es real que, una vez puesta en funcionamiento, la maquinaria funciona un poco mejor que la de otros países y, además, provoca un poco más de temor a quienes deben llegar para ser sometidos a proceso. Cierto es que allá casi todo puede arreglarse con dinero y unos pocos años de prisión, convenidos adecuadamente con los Fiscales, pero también es verdad que este proceso, a los tres citados, como a los directivos futbolísticos detenidos o en vías de estarlo, les provocará un vuelco fundamental en sus vidas y difícilmente puedan seguir ligados al mundo del fútbol, salvo que lo hagan por interpósitas personas. Una especie de muerte civil.

  1. El Gobierno Nacional, a través de la AFIP, denunció a Burzaco y los Jinkis. Buena noticia, aunque se nos ocurre que algo tarde. Nos preguntamos si esto hubiera sucedido sin la actuación de la Justicia de EEUU. Respondemos que estamos seguros que no. No será el momento de empezar a resolver y actuar simplemente como corresponde? Si esto se sabía desde hace años. Debió aguardarse a la muerte de Julio ¨Grondona para que se destape la olla?
  2. También desde Italia nos llegaron las noticias de la detención de Pablo Cosentino, por arreglar partidos de fútbol. Pavada de imputación, ¿no?

Muchos conocen a este señor porque vive en pareja con la modelo Daniela Urzi. Nosotros lo conocemos por ser un sencillamente un hombre al que puede calificarse de delincuente, además de por arreglar partidos (comportamiento que es delito en Italia), por hacer desde hace años negocios fraudulentos con la representación de jugadores de fútbol.

Viene a cuento informar, que en el libro Fútbol y Violencia. Miradas y Propuestas (Lugar Editorial. Año 2010), hace ya un lustro, hacíamos saber sobre las actividades de éste pícaro personaje, con nombre y apellido.

Por ello, la sorpresa no fue por los hechos endilgados al Sr. Consentino, sino porque la Justicia italiana hubiera tomado cartas en el asunto. ¿Cuánto hace que el hombre evade impuestos, lucra con la compra de partidos, con la incentivación y con el soborno? Ojalá que se lo establezca rápidamente.

Mientras tanto, por supuesto que también se benefició (como Burzaco y los Jinkis) con la detención domiciliaria.

Muchos opinarán, con parte de razón, que este tipo de prisión es una joda (permítase la expresión). Los entiendo y lo comparto. Pero también agrego que estar preso, sea en una cárcel de máxima seguridad o sea en un palacio u hotel cinco estrellas, por más cómodo que uno pueda estar, es también eso: estar preso. Y siempre he apuntado que parece preferible estar en libertad viviendo en una Villa de Emergencia, que preso en Castillo de Oro.

  1. Mientras tanto, la Jueza María Romilda Servini de Cubría, después de muchos meses de trabajo demasiado tranquilo con la denuncia e investigación promovida por la Diputada Graciela Ocaña (gran investigadora en estos temas), tomó una medida que, por supuesto, también se presenta como tardía: la designación de veedores en la AFA, para verificar de algún modo cómo se distribuyen los fondos que llegan en cantidad desde el Estado Nacional a través de Fútbol para Todos. Independientemente de la tardanza (porque debió resolverse hace muchos meses), celebramos la medida, aunque lamentamos profundamente que dos de los designados, desde nuestra perspectiva, se encuentren en situación discutible a la hora ser considerados imparciales –o mejor dicho no contaminados- para llevar a cabo la labor encomendada. Nos referimos concretamente al abogado Alberto Piotti y al contador Horacio Della Rocca. No se satisfacen los requisitos de imparcialidad únicamente apelando a la capacidad para ocuparse de una determinada tarea. La idoneidad es un conjunto, y tanto Piotti como Della Rocca han estado y están muy vinculados con el mundo del fútbol, y sus negocios, como para que ahora sean quienes revisen libros y documentación de la AFA y de todo lo que la rodea, y mantengan estricta imparcialidad con muchas personas y empresas con las cuales de una u otra forma han estado ligados. Siempre se dice que en algunas esferas hay que ser y parecer. En todo lo que tenga que ver la Justicia, la máxima debe aplicarse rajatabla.

De adverso estimamos muy acertada la designación de la contadora Alicia Beatriz López. Su capacidad está garantizada y en los hechos, no ha tenido injerencia nunca en los negocios o en el ambiente del fútbol. Confiamos puntualmente en la actividad de esta ex funcionaria del Gobierno Nacional, quien –a todo evento- es una especialista en lavado de dinero.

Con la lentitud e hipocresía propia de nuestro sistema de valores, y de nuestro sistema político-judicial, advertimos como se va corriendo el velo en este tiempo. La impunidad y la corrupción existen y continuarán. Se necesitan muchos años para que, culturalmente, entendamos algunas circunstancias vinculadas con la cosa pública. No obstante, conforme lo habíamos adelantado cuando sucedió, la muerte de Julio Grondona desató un fenómeno lógico, que aunque no tenga la fuerza de un tsunami, quizás pueda permitirnos que, a través de una tormenta tropical, todos los integrantes del mundo fútbol (en el cual siempre incluimos a los simpatizantes) sepamos que –quizás- algo distinto pueda concretarse, si nos quitamos el miedo formulando las denuncias que correspondan, y forzando a los estamentos judiciales y políticos a avanzar decididamente contra las violencias físicas, psicológicas y económicas que, se sabe, engendran la corrupción.

Buenos Aires, junio 28 del año 2015.

Mariano Bergés

SAF

 

 

En el último mes y medio hemos tenido la fortuna de observar lo que podría denominarse sálvese quien pueda.

La siempre lenta, morosa y por momentos cándida o connivente Justicia de algunos países, por ejemplo la italiana y la argentina, no obstante han evidenciado algunos escasos avances que –pese a ello- permitieron desnudar cantidad de focos de corrupción en el mundo del fútbol. Y decimos Sálvese quien Pueda porque, a diferencia de otros años y épocas, quienes no aparecen mencionados en estos escándalos, lejos de colaborar, comienzan a escapar en estampida., y desaparecen, como ocurre en la Copa América. Veamos:

  1. 1. Cuando se estremeció el mundo del fútbol, hace pocos días, con la orden de detención de altos directivos de distintas Confederaciones y de la FIFA, además de terceros allegados a los negocios, advertimos que, como no podía ser de otra forma, algunos argentinos estaban en la lista. Alejandro Burzaco, titular de la empresa Torneos, y Hugo y Mariano Jinkis, padre e hijo respectivamente, quienes estaban a cargo de la sociedad Full Play Group.

Otros directivos del fútbol y conocidos –socios en ciertos casos- de estos señores, se ocultaron rápidamente. A la Justicia de nuestro país nadie le tema. Sean argentinos, sean extranjeros. Su falta de respuestas es, actualmente, de tal magnitud, que por momentos dan risa sus resoluciones, y por otros una fuerte sensación de impotencia porque generan impunidad sistémica.

En Italia las cosas, en materia de Justicia, funcionan un poco mejor. Pero lo que quedó claro fue que Burzaco, prófugo, apenas pudo moverse pocos kilómetros y, acorralado, se presentó detenido en una comisaría de Bolzano, aprovechando su condición de ciudadano  italiano. Logró quedar privado de libertad pero en la modalidad domiciliaria que, se sabe, es bastante más cómoda que la que se cumple en cárceles.

Como para no ser menos, hace pocos días se presentaron detenidos ante el Juez Bonadío Hugo y Mariano Jinkis. Ya se había denegado la exención de prisión pedida para evitar la prisión. No lo lograron pero, como el coimputado Burzaco se les aceptó permanecer presos en domicilio. Porqué a ellos sí y a otros no se preguntarán con seguridad muchos ciudadanos. Pues bien, esta es nuestra Justicia les contesto. Con prebendas, arreglos espurios, esperas, acuerdos entre bambalinas, dinero, poder, etc. Para quien se ha pasado una vida transitando por los Tribunales, dentro y fuera de sus estructuras, todo esto se entiende perfectamente. El ciudadano de a pié solo asiste impávido a este teatro de la impunidad como regla básica no escrita.

No conviene, porque no es cierto, pregonar bondades o grandilocuencia de la Justicia de los EEUU. Al cabo, lo que sucede en Guantánamo es intolerable y los jueces de ese país lo vienen tolerando y justificando sin chistar. Pero también es real que, una vez puesta en funcionamiento, la maquinaria funciona un poco mejor que la de otros países y, además, provoca un poco más de temor a quienes deben llegar para ser sometidos a proceso. Cierto es que allá casi todo puede arreglarse con dinero y unos pocos años de prisión, convenidos adecuadamente con los Fiscales, pero también es verdad que este proceso, a los tres citados, como a los directivos futbolísticos detenidos o en vías de estarlo, les provocará un vuelco fundamental en sus vidas y difícilmente puedan seguir ligados al mundo del fútbol, salvo que lo hagan por interpósitas personas. Una especie de muerte civil.

  1. El Gobierno Nacional, a través de la AFIP, denunció a Burzaco y los Jinkis. Buena noticia, aunque se nos ocurre que algo tarde. Nos preguntamos si esto hubiera sucedido sin la actuación de la Justicia de EEUU. Respondemos que estamos seguros que no. No será el momento de empezar a resolver y actuar simplemente como corresponde? Si esto se sabía desde hace años. Debió aguardarse a la muerte de Julio ¨Grondona para que se destape la olla?
  2. También desde Italia nos llegaron las noticias de la detención de Pablo Cosentino, por arreglar partidos de fútbol. Pavada de imputación, no?

Muchos conocen a este señor porque vive en pareja con la modelo Daniela Urzi.l Nosotros lo conocemos por ser un sencillamente un hombre al que puede calificarse de delincuente, además de por arreglar partidos (comportamiento que es delito en Italia), por hacer desde hace años negocios fraudulentos con la representación de jugadores de fútbol.

Viene a cuento informar, que en el libro Fútbol y Violencia. Miradas y Propuestas (Lugar Editorial. Año 2010), hace ya un lustro, hacíamos saber sobre las actividades de éste pícaro personaje, con nombre y apellido.

Por ello, la sorpresa no fue por los hechos endilgados al Sr. Consentino, sino porque la Justicia italiana hubiera tomado cartas en el asunto. Cuánto hace que el hombre evade impuestos, lucra con la compra de partidos, con la incentivación y con el soborno? Ojalá que se lo establezca rápidamente.

Mientras tanto, por supuesto que también se benefició (como Burzaco y los Jinkis) con la detención domiciliaria.

Muchos opinarán, con parte de razón, que este tipo de prisión es una joda (permítase la expresión). Los entiendo y lo comparto. Pero también agrego que estar preso, sea en una cárcel de máxima seguridad o sea en un palacio u hotel cinco estrellas, por más cómodo que uno pueda estar, es también eso: estar preso. Y siempre he apuntado que parece preferible estar en libertad viviendo en una Villa de Emergencia, que preso en Castillo de Oro.

  1. Mientras tanto, la Jueza María Romilda Servini de Cubría, después de muchos meses de trabajo demasiado tranquilo con la denuncia e investigación promovida por la Diputada Graciela Ocaña (gran investigadora en estos temas), tomó una medida que, por supuesto, también se presenta como tardía: la designación de veedores en la AFA, para verificar de algún modo cómo se distribuyen los fondos que llegan en cantidad desde el Estado Nacional a través de Fútbol para Todos. Independientemente de la tardanza (porque debió resolverse hace muchos meses), celebramos la medida, aunque lamentamos profundamente que dos de los designados, desde nuestra perspectiva, se encuentren en situación discutible a la hora ser considerados imparciales –o mejor dicho no contaminados- para llevar a cabo la labor encomendada. Nos referimos concretamente al abogado Alberto Piotti y al contador Horacio Della Rocca. No se satisfacen los requisitos de imparcialidad únicamente apelando a la capacidad para ocuparse de una determinada tarea. La idoneidad es un conjunto, y tanto Piotti como Della Rocca han estado y están muy vinculados con el mundo del fútbol, y sus negocios, como para que ahora sean quienes revisen libros y documentación de la AFA y de todo lo que la rodea, y mantengan estricta imparcialidad con muchas personas y empresas con las cuales de una u otra forma han estado ligados. Siempre se dice que en algunas esferas hay que ser y parecer. En todo lo que tenga que ver la Justicia, la máxima debe aplicarse rajatabla.

De adverso estimamos muy acertada la designación de la contadora Alicia Beatriz López. Su capacidad está garantizada y en los hechos, no ha tenido injerencia nunca en los negocios o en el ambiente del fútbol. Confiamos puntualmente en la actividad de esta ex funcionaria del Gobierno Nacional, quien –a todo evento- es una especialista en lavado de dinero.

 

Con la lentitud e hipocresía propia de nuestro sistema de valores, y de nuestro sistema político-judicial, advertimos como se va corriendo el velo en este tiempo. La impunidad y la corrupción existen y continuarán. Se necesitan muchos años para que, culturalmente, entendamos algunas circunstancias vinculadas con la cosa pública. No obstante, conforme lo habíamos adelantado cuando sucedió, la muerte de Julio Grondona desató un fenómeno lógico, que aunque no tenga la fuerza de un tsunami, quizás pueda permitirnos que, a través de una tormenta tropical, todos los integrantes del mundo fútbol (en el cual siempre incluimos a los simpatizantes) sepamos que –quizás- algo distinto pueda concretarse, si nos quitamos el miedo formulando las denuncias que correspondan, y forzando a los estamentos judiciales y políticos a avanzar decididamente contra las violencias físicas, psicológicas y económicas que, se sabe, engendran la corrupción.

Buenos Aires, junio 28 del año 2015.

 

Mariano Bergés

SAF